Los gastos con energía eléctrica ocupan la segunda posición en el ranking de los gastos que más pesan en el presupuesto brasileño. Esto es lo que dice la encuesta realizada por la Asociación de Grandes Consumidores Industriales de Energía (Abrace), en colaboración con el instituto Ipespe. Nueve de cada diez entrevistados en la encuesta afirman que su factura de electricidad es más cara ahora que en los últimos cinco años.
La crisis del agua es uno de los factores responsables de este aumento. Sin embargo, este problema ya era más grave en 2021. Desde entonces, Brasil ha conseguido evitar las sequías gracias a la llegada de la temporada de lluvias. Sin embargo, el escenario no es del todo optimista. Por ello, pensar en alternativas sostenibles para blindar los impactos de la crisis del agua sigue siendo una prioridad en varios sectores.
En la industria, no es diferente. Este segmento tiene a su favor la arquitectura sostenible, una de las grandes responsables de la eficiencia energética en las fábricas. En esta tendencia, además de reducir el consumo de energía, la empresa se destaca por la sostenibilidad, asegurando mejores posiciones en el mercado.
De eso hablaremos en este contenido. Siga leyendo y vea cómo reducir los costes de electricidad invirtiendo en soluciones sostenibles de iluminación y ventilación natural.
La crisis del agua y la subida de la electricidad
A lo largo de 2021, la energía eléctrica fue el artículo que más pesó en los bolsillos de los brasileños, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Al inicio del segundo semestre de 2021, la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel) comenzó a adoptar la llamada Bandera 2 para compensar los impactos generados por las crisis hídricas.
Esta medida era necesaria porque, ante la escasez de agua, había que recurrir a las centrales termoeléctricas para generar energía. Como el funcionamiento de las centrales termoeléctricas es costoso, el aumento de la bandera tarifaria fue una forma de trasladar estos costes al consumidor.
Sin embargo, con la llegada de la temporada de lluvias entre 2021 y 2022 -que repuso los embalses y alivió el funcionamiento de los sistemas- Brasil logró superar la crisis hídrica. Tanto es así que, en abril de 2022, Aneel anticipó el fin del cargo relacionado con la bandera de escasez hídrica. La perspectiva es que la bandera de la recaudación se mantenga en la categoría verde -sin aumentos- en el 97% de los escenarios hasta finales de 2022.
Pero vale la pena recordar que, a pesar del alivio relacionado con el alivio de la crisis del agua, el escenario sigue siendo muy preocupante, especialmente teniendo en cuenta el período de inestabilidad económica y la alta inflación.
No por casualidad, la Aneel aumentó en un 56% el valor de la Bandera Amarilla y en un 57% el de la Roja 1. Es decir, si es necesario volver a utilizar estas banderas de escasez, el valor de la energía eléctrica será aún mayor que en 2021. Por lo tanto, la concienciación en torno a las prácticas sostenibles sigue siendo una de las formas más viables de reducir el consumo de energía.
En el segmento industrial, esta preocupación es aún más urgente. Esto se debe a que la extensión de las cadenas de producción consume mucha más energía. En este sentido, además de invertir en fuentes renovables, los gestores han priorizado los sistemas inteligentes de iluminación y ventilación en las industrias. Hablaremos más de estos sistemas a lo largo del contenido.
¿Cómo influyen las diferentes banderas arancelarias en las crisis del agua?
Vimos que la adopción de la bandera de la escasez de agua representó un aumento significativo del valor de la energía eléctrica en los bolsillos de los brasileños. También hemos visto que, con la llegada de la temporada de lluvias, la bandera verde vuelve a estar vigente. En este caso, significa que no hay aumento de los costes variables de generación de electricidad.
Además de la Bandera Verde, Aneel trabaja con las Banderas Amarilla, Roja 1 y Roja 2. Los valores de estas banderas tarifarias para el periodo de julio de 2022 a junio de 2023 se definen como sigue:
- Bandera amarilla (condiciones menos favorables): R$ 2,989 cada 100 kWh consumidos;
- Bandera roja 1 (condiciones desfavorables): R$ 6.500 cada 100 kWh consumidos;
- Bandera roja 2 (condiciones muy desfavorables): R$ 9,795 por cada 100 kWh consumidos.
¿Cómo puede el sector industrial contribuir a evitar escenarios de crisis del agua en el país?
Desde hace algún tiempo, la inversión en fuentes de energía renovables se ha convertido en una tendencia mundial, como la energía eólica, la energía solar y la biomasa. En Brasil, este segmento ha crecido exponencialmente en los últimos años y ha cobrado aún más fuerza en el contexto de la crisis del agua. Pero, al tratarse de inversiones elevadas con rendimientos a largo plazo, pueden no ser la mejor solución para quienes tienen prisa.
En este caso, son más interesantes otras alternativas de arquitectura sostenible, como los sistemas de iluminación y ventilación naturales. Estas soluciones aportan un rendimiento más rápido y tienen resultados que van más allá del ahorro de energía.
Este tipo de solución ayuda a las industrias a lograr la eficiencia energética. Además, la iluminación y la ventilación naturales aceleran la productividad de las fábricas, haciéndolas, de hecho, sostenibles.
No es de extrañar que las industrias que combinan la eficiencia energética y los procesos optimizados tengan más probabilidades de recibir la certificación LEED. El principal sello de sostenibilidad industrial del mundo, LEED, se utiliza en más de 160 países. La certificación funciona como un certificado de la responsabilidad social de las empresas, demostrando la eficacia de sus procesos de producción.
A continuación, ofrecemos más detalles sobre estas soluciones sostenibles que pueden optimizar su cadena de producción, aportando eficiencia energética y reduciendo significativamente los impactos de la crisis del agua.
Soluciones de iluminación natural
Las cúpulas prismáticas son las opciones campeonas en lo que respecta a la iluminación natural para la industria, ya que funcionan con un coste energético cero. Con estas estructuras, la fábrica ya no es rehén de las lámparas artificiales durante toda la jornada laboral.
Esto sólo es posible gracias al policarbonato prismático. Esta tecnología garantiza una difusión óptima de la luz solar, bloqueando los rayos UV y manteniendo la caseta bien iluminada durante una media de ocho horas al día.
La reducción del uso de las lámparas durante tanto tiempo y a lo largo de varios meses genera una reducción muy significativa de la tarifa energética. Además del control presupuestario, la industria también gana en términos de rendimiento. Un entorno eficazmente iluminado fomenta la productividad y el bienestar de los empleados.
Soluciones de ventilación natural
Los sistemas de ventilación natural que combinan persianas y rejillas industriales son también excelentes recursos para quienes buscan la eficiencia energética. Estas soluciones proporcionan confort térmico en el interior de la nave y evitan el uso de aparatos de aire acondicionado. Además, la calidad del aire mejora considerablemente y la renovación constante evita la acumulación de aire viciado.
Podemos decir que los sistemas de ventilación natural son soluciones esenciales para quienes buscan combinar el confort térmico, la productividad de los equipos y el ahorro de energía en la industria. Además de proporcionar una mejor calidad de vida en el lugar de trabajo, estas soluciones ayudan a los gestores a evitar los impactos de la crisis del agua en escenarios más alarmantes.
¿Sabe cómo contribuyen los proyectos de ventilación a la sostenibilidad del sector? Responda a nuestro cuestionario y descubra si sabe de qué está hablando.
Soluciones centradas en la sostenibilidad
Las soluciones enfocadas a la sostenibilidad, como las cúpulas, las linternas y las persianas industriales, se han ido consolidando como prioritarias tanto en las obras nuevas como en los proyectos de reconversión industrial. La práctica de la readaptación, de hecho, suele ser la técnica más viable para modernizar la nave industrial sin tener que pagar una estructura nueva desde cero.
La instalación de soluciones de iluminación y ventilación natural son un punto destacado en este tipo de proyectos, e incluso pueden implementarse con la ayuda de metodologías de ingeniería informática que garantizan el alto rendimiento de los sistemas.
La aplicación de la dinámica de fluidos computacional (CFD), por ejemplo, permite validar en la realidad virtual los cálculos necesarios para diseñar un proyecto de ventilación natural con el máximo rendimiento. Así, además de garantizar el confort térmico y la calidad del aire en el entorno industrial, no habrá consumo de energía de estos sistemas ni del uso de equipos de aire acondicionado, de los que se puede prescindir.
Así pues, si quiere modernizar las instalaciones de su fábrica pensando en la eficiencia energética, ya sabe por dónde empezar su inversión. ¿Te gusta la idea? Vea cómo la fábrica de Lubeka redujo su factura de electricidad en poco tiempo con las soluciones inteligentes del Grupo MB.
